
Virginia Alvarado, directora de Docencia de la UMAG, sostuvo que “acá tenemos detectadas dos causas principales, la primera es el perfil de ingreso de los estudiantes, que en general viene deprimido en las áreas de lenguaje y matemáticas”.
En este contexto, explicó que los estudiantes son evaluados al momento de incorporarse a la casa de estudios regional. “Por lo tanto, no es una impresión, sino que es una realidad comprobada a través de datos cuantitativos”, declara la directora de Docencia.
La segunda causa que explica la deserción en la región, “está relacionada con las habilidades blandas o sociales, de cómo se insertan en el medio universitario, que es muy distinto al ambiente del que provienen, esa libertad y esa autonomía, provoca cierta desorientación en los estudiantes”, señala Virginia Alvarado.
Una tercera causa está relacionada con la no obtención de las becas y créditos a los que postulan, “no siempre logran mantener sus beneficios”.
Medidas tomadas
Con el objetivo de abordar esta situación, la directora de Docencia señaló que la casa de estudios impulsó distintos programas de apoyo. “En un convenio de desempeño, que tenemos con el Ministerio de Educación, nos permitió, desde el año pasado, bajar la tasa de deserción a 21,3%”, sostuvo.
Explicó que estos planes de apoyo contemplan, la disposición de profesores mentores para los alumnos nuevos, la evaluación del perfil, tutores, cursos complementarios a las asignaturas más críticas. Además, se incorporaron mayores recursos a la biblioteca y los alumnos pueden acceder a ellos con menos requisitos. “Hay una unidad de apoyo pedagógico que operacionaliza estos programas que complementan la formación de los alumnos de primer año y los ayudan en un proceso de inducción, para cubrir todas sus necesidades”, señaló Virginia Alvarado.