
La Región de Magallanes es pionera en la conversión de vehículos a gas.
Por ello existe una larga historia en el uso de este combustible como insumo vehicular, que en Chile solamente se limita a los automóviles livianos para el servicio de taxi, livianos comerciales y medianos adaptados para el uso de Gas Natural Comprimido, GNC.
Los precios son claramente notorios: $170 por metro cúbico equivalen a más de $700 que cuesta un litro y medio de bencina, casi un 70% de ahorro. La competitividad en precio y los beneficios medioambientales, colocan al gas en ventaja frente a los combustibles líquidos.
Para el presidente de la Asociación Gremial de Taxis Colectivos de Punta Arenas, (Tacopa), Marcelino Aguayo, esto sin duda ha sido un beneficio económico no solamente para los transportistas, sino también para los pasajeros, ya que el precio del pasaje se torna más asequible.
En nuestra región existe dos talleres autorizados que permiten la conversión a gas: uno de ellos es propiedad de Luis Olivares, quien desde hace tres años se ha dedicado a la modificación de vehículos a este hidrocarburo.
“En este momento, nos hemos ampliado con la calidad de servicio que entregamos y los clientes han confiado en nuestros equipos y servicios”, aseguró.
Ubicado en el Barrio Prat, este taller ha realizado cerca de 520 conversiones y entre 23 a 25 modificaciones mensuales, los que en su mayoría corresponden a vehículos livianos destinados a transporte de pasajeros (taxis y colectivos).
Particulares
La conversión de vehículos a gas a particulares, ha sido tema de discusión en el Congreso, a tal punto que el senador PS, Pedro Muñoz, ha insistido a los ministerios de Hacienda y Transportes, la necesidad de este beneficio, con el objetivo de diversificar la matriz energética del parque automotriz y reducir la contaminación ambiental, entre otros puntos.
“En los últimos años se establecieron obstáculos y trabas innecesarias a un proceso que había sido por décadas bastante expedito y seguro”, señaló el legislador, quién apuntó a que la Región de Magallanes debería recuperar sus antiguas normas en la materia al tiempo de extenderse, también, las facilidades al centro del país.
Proyectos como la planta de Gas Licuado de Petróleo (GLP), ubicada en Quintero, y la explotación de yacimientos en Tierra del Fuego, permitirían reevaluar esta alternativa con mayor perspectiva.