“Ya no sé si era un control positivo, se encontraron restos. Técnicamente hablando, desconozco si se traspasó la línea”, del dopaje.
“Ya no recuerdo exactamente quién estaba presente en aquel momento, pero Hein dijo simplemente: ‘Es un gran problema para mí, un puñetazo para nuestro deporte un año después del asunto Festina, por lo que necesitamos encontrar algo’. Entonces se retiró la fecha de la receta”, detalló Armstrong.
En aquella época, Armstrong se benefició de una supuesta autorización para utilizar una crema a base de corticoides y, para sorpresa general, la UCI aceptó sus explicaciones.
Desde que Armstrong reconoció abiertamente haberse dopado, Verbruggen fue acusado de haber encubierto al ex ciclista, aunque el ex dirigente holandés lo negó en enero pasado.
“No crean que voy a proteger a gente después de la manera cómo me han tratado. Es ridículo. No les guardo lealtad. No voy a mentir para proteger a otros”, amenazó Armstrong.