
El príncipe Harry, el número cuatro en la línea de sucesión al trono británico, comenzó ayer una travesía largamente planeada hasta el Polo Sur. Tras una serie de dificultades por las condiciones climáticas en la Antártida, finalmente los tres equipos iniciaron la carrera en la hoy, informó la organización “Walking With The Wounded”.
Durante 15 días, los participantes recorrerán 280 kilómetros de hielo antártico sobre esquíes para llegar al punto más al sur del planeta. El primer día el recorrido será de 12 kilómetros. Los compañeros de viaje del nieto de la reina Isabel son veteranos de guerra heridos que en algunos casos necesitan prótesis para poder caminar.