Respecto al testigo, reafirmó parte de lo que consigna la acusación que inculpa de estos hechos a Jonathan Ojeda Román, Víctor Llanquín Arteaga y Kevin Boitano Trujillo.
Dijo que esa madrugada andaba acompañado de un amigo, pero esperaban a otros para ingresar a la fiesta “mechona”, claro que a la distancia visualizaron a un grupo de 8 o 9 jóvenes, a quienes captaron en mala actitud y por eso no quisieron ingresar al recinto universitario. Refirió que estas personas andaban mal vestidas y estaban cobrando “peaje” para pasar. Es en estas circunstancias que Max Bahamonde y otros dos amigos se topan con ese grupo que los termina agrediendo y donde la peor parte la saco Bahamonde quien murió producto de varias puñaladas.
Si bien la defensa de los acusados no controvierte el fallecimiento de una persona, sí critican la investigación porque a su juicio no aclara la participación de los acusados.
“Mi compañero me dijo no entremos porque nos puede pasar algo”, recordó el estudiante, quien en su declaración dijo que le temieron al grupo que esa noche estaba “macheteando” a la gente (pidiendo plata y cigarrillos), además “porque eran flaites para vestir. Por eso le dije a mi amigo, si este grupo entra a la fiesta se va a armar una pelea”.
El juicio oral se retoma hoy, a partir de las 8.30 horas, y debería terminar mañana.
La fiscalía acusa a Ojeda, Boitano y Llanquín del asesinato de Max Bahamonde. El padre de la víctima, René Bahamonde Mansilla, presentó una querella criminal, acción mediante la cual exige justicia y la máxima sanción para quienes arrebataron la vida de su hijo.