El 2011 Ramón Arteaga Robinson aprovechó que la justicia le permitió cumplir los cinco años de cárcel que le quedaban, en libertad asistida, para salir del país. El Ministerio Público iniciará las gestiones tendientes a solicitar la extradición de la persona detenida en Río Gallegos, República Argentina, Ramón Arteaga Robinson, quien al fugarse cumplía en Punta Arenas una pena de 10 años de cárcel, por dos homicidios.

Aprovechando que un juez de Garantía había accedido a la petición de la Defensoría Penal Pública, que en 2011 solicitó la sustitución del régimen cerrado que cumplían Ramón Arteaga Robinson y Patricio Oyarzo Peters, por uno en libertad asistida especial, el primero decidió volver a su país de origen.

Ambos fueron encontrados culpables del doble crimen, del 7 de julio de 2005, en perjuicio de Juan Carlos Vera Silva y José Gabriel Cisterna Cisterna, y fueron condenados a 10 años y un día de presidio cada uno en régimen cerrado, con programa de reinserción social.

La misma sanción recibió Katerine Rossana Muñoz Gómez, conocida como la “Katty chispa”. En esa época todos tenían 18 años.


Libertad

Sin embargo, a comienzos de diciembre de 2011, el entonces juez de Garantía, Andrés Provoste, acogió la petición de la abogada Gustava Aguilar, y permitió que Arteaga y Oyarzo terminaran de cumplir el saldo de la pena en libertad asistida, porque ya habían completado la mitad de la sanción, o sea, cinco años.

Consultado ayer Eugenio Campos, fiscal de esta causa y que llevó al trío a juicio por homicidio calificado, recordó que dentro del plazo recurrieron a la Corte de Apelaciones, instancia judicial que hace justo dos años (26 de diciembre de 2011) revocó la decisión del Juzgado de Garantía y ordenó que ambos volvieran a la sección juvenil de la cárcel de Punta Arenas, a terminar de cumplir el saldo de la pena.

Oyarzo Peters cumplió y se presentó al Centro de Rehabilitación. No así Arteaga Robinson quien aprovechó la instancia para abandonar el país y ahora fue capturado en Río Gallegos.


Extradición

La captura en Argentina de Ramón Arteaga, dijo el fiscal Campos, “viene a demostrar lo que nosotros estábamos señalando, que esta persona aún no estaba en condiciones de poder cumplir esta sanción en un régimen de libertad”.

Una vez que el Ministerio Público sea notificado oficialmente de la detención de Arteaga, el requerimiento chileno pasará por una extradición, igual como sucedió hace poco con Sebastián Curiche, traído desde Argentina para que ingresara a cumplir la pena de 15 años de cárcel, también por homicidio.

Campos explicó que esta extradición parte por una solicitud que se realiza a través del Juzgado de Garantía, luego los antecedentes se remiten a la Corte de Apelaciones y esta instancia los envía al Ministerio de Relaciones Exteriores.