La justicia rusa puso fin a las acciones judiciales contra ocho militantes de Greenpeace, entre ellos una argentina y el capitán del barco, acusados de “vandalismo” por una acción de protesta en el Ártico y amnistiados por una nueva ley del Parlamento ruso. En su cuenta Twitter, la organización anunció sucesivamente el cierre de los procesos contra el turco Gizem Akhan, el neozelandés Jonathan Beauchamp, el holandés Mannes Ubels, el capitán estadounidense del navío Peter Willcox, la argentina Camila Speziale, el polaco Tomasz Dziemianczuk, el ucraniano Ruslan Yakushev y el ruso Dimitri Litvinov.