
Una de estas lesiones, la del párpado superior, lo más probable es que haya sido provocada por un elemento cortante, que entiende el médico que fue con el vidrio de una botella. “Esto le produjo una herida cortante del globo ocular, en la parte posterior, que comprometió casi en su totalidad la parte posterior del globo, lo que hizo que en el mismo accidente se produjera un vaciamiento del contenido ocular. Fue el posterior escáner lo que vino a confirmar que el ojo había perdido su contenido. Cuando existe un trauma contuso cortante, que provoca que el contenido ocular de alguna manera se exteriorice, a eso uno llama estallido ocular”, explicó Demetrio.
Esto puede ser provocado por un golpe contuso de alta energía, “que en palabras comunes es cuando el ojo revienta, o con heridas cortantes que penetran hasta la cavidad ocular, que nosotros llamamos heridas penetrantes. Estamos hablando de lesiones traumáticas graves donde la función visual es lo primero que se pierde, como sucedió en este caso, y eso es irreversible, porque no hay retina”. A este paciente fue posible mantenerle el globo ocular como un elemento anatómico.
El procedimiento que se le hizo a Pablo Gallardo en pabellón fue una evisceración y se le practicó un aseo quirúrgico para evitar infecciones, “con la finalidad de que ojalá el mismo ojo, o las paredes externas, sirvan como una especie de prótesis”.
El joven argentino está siendo tratado con antibióticos, antiinflamatorios y es necesario esperar que la herida cicatrice bien y en un mes se podrían ver los resultados estéticos, de movilidad, y evaluar la colocación de una prótesis externa.
El paciente está bien, sin dolor, sin complicaciones iniciales de sus heridas, con una inflamación normal. Demetrio dijo que “se encuentra de buen ánimo, consciente, lúcido y se le explicó lo que le sucedió. Se nota que es una persona joven, con ganas de salir adelante, y dijo que espera continuar realizando sus actividades deportivas, aunque al principio puede que le cueste, pero más adelante va a poder seguir realizando una vida casi normal”.
Por lo pronto permanecerá una semana internado, para completar un tratamiento antibiótico endovenoso, por tratarse de lesiones profundas y en un ambiente contaminado. Después podría continuar en controles ambulatorios y lo más probable es que este fin de semana se coordine un traslado a su ciudad de origen, Río Cuarto, en la Provincia de Córdoba.