A más de un mes del accidente de Michael Schumacher, y tras el inicio del tratamiento al coma inducido, los médicos han reportado leves avances al retiro de medicamentos, sin embargo no son muchas las esperanzas de que pueda mostrar progreso. Los médicos siguen recalcando el tiempo que podría tomar este tratamiento y también los riesgos a la respuesta que pueda mostrar el cuerpo del siete veces campeón de la Fórmula uno.
“Por desgracia no se puede notar que los riesgos al tratamiento de coma artificial vayan disminuyendo, el sueño artificial profundo en el que el paciente está, es un estado vegetativo persistente” dijo el profesor Heinzpeter Moecke, Jefe del Departamento de Medicina de Emergencia de Askepios en Hamburgo.