Fuentes de la “Nueva Mayoría” señalaron que a raíz del caso de los subsecretarios renunciados, esta vez, las nuevas autoridades tomaron mayores resguardos para chequear los datos de los futuros gobernadores.
Por ejemplo, la Democracia Cristiana (DC), repartió la semana pasada una “declaración jurada simple” que debía ser llenada por los aspirantes a cargos públicos. En dicho documento, los postulantes debían dar fe de que no tienen causas pendientes en la justicia, deudas comerciales u otras causas de eventuales flancos de críticas o inhabilidades.
El mismo método fue asumido por algunos intendentes designados, quienes incluso han incluido en categorías como que los postulantes señalen si han mantenido una conducta de acuerdo a la “moral y las buenas costumbres”.
El nuevo subsecretario, además, tiene pendiente fijar una reunión con su actual homólogo, Rodrigo Ubilla, pero abordar el traspaso de mando con miras al 11 de marzo.