
La importancia se debe que su declaración permitió en la época de la desaparición, realizar una excavación en lo que era un recinto de la iglesia ubicado a 2 kilómetros y medio al norte de Punta Arenas, denominado casa de retiro Juan Pablo II.
Precisamente en este sector se centró la búsqueda por más de una semana, pero quien entregó ese antecedente, señala que ese trabajo fue mal hecho por cuanto el lugar que él señaló era 20 metros más al norte de donde se centro el operativo policial.