
Aunque a nivel nacional no hay casos confirmados, el Ministerio de Salud (Minsal) está preparado para que en cualquier minuto se confirme alguno de los cuatro casos sospechosos en observación, y activar así la alerta nacional.
Para colmo de males, el uso del escáner de fiebre que se usa para controlar a los pasajeros que llegan a los aeropuertos ya no sirve, ya que el virus está muy esparcido por el mundo. Además, cuando la persona está incubando el virus el aparato no lo detecta. El periodo de incubación del actual brote es similar al de cualquier otro tipo de influenza: tres a cuatro días, en promedio.
Para estos casos, y siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Chile creó en 2005 el Plan Nacional de Pandemia, el cual estima que los adultos serían los más afectados. El plan contempla el aislamiento de los sospechosos, la compra de stock de medicamentos, contratación de personal y el aumento de la distribución de reactivos para diagnósticos rápidos.
Medidas regionales
Hasta la fecha, se han registrado en Magallanes sólo dos posibles casos de fiebre porcina, siendo el último de estos el de una funcionaria pública que retornó de vacaciones de México. Afortunadamente, fue sólo el susto provocado por la alerta de la noticia ya que los exámenes no detectaron la presencia del virus.
Por su parte, personal del Servicio de Salud Magallanes recorrió el jueves algunos de los campamentos petroleros de la zona vacunando a sus trabajadores, en especial a los de origen mexicano.
Además, en la frontera de Monte Aymond, se vacunó a todo el personal administrativo, Carabineros, Policía de Investigaciones, gente del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) que trabaja en aduana.
La seremi de Salud, María Isabel Banciella, comentó ayer que, conjuntamente con la aplicación de la vacuna anti influenza, se realizó una capacitación, al percibir un grado de desinformación de los funcionarios aduaneros y sus instituciones, reflejado en el uso innecesario de mascarillas durante este fin de semana, donde el flujo de argentinos se vio incrementado.
La autoridad sanitaria explicó que aún no es necesario tomar dichas medidas preventivas, porque la situación de ambos países no presenta casos confirmados del virus.
“En la visita a la frontera, nos dimos cuenta de que recibieron mascarillas y elementos de protección personal, lo que indica una falta de información por parte de los servicios públicos. Nosotros como autoridad sanitaria avisaremos en su minuto para que tomen las medidas correspondientes”, dijo Banciella.
Traslados
Como medidas preventivas, si se desarrollara un real brote epidémico, las autoridades sanitarias tienen contemplado el hospital regional como el único y exclusivo centro de recepción de pacientes con la epidemia, suspendiendo las cirugías y consultas normales para evitar una mayor propagación.
Como el recinto asistencial se convertiría en el centro de la epidemia, los demás enfermos serían trasladados al hospital de Porvenir para evitar su contagio.
Banciella comentó que se está estudiando habilitar un “poli de fiebre” en la Cruz Roja, para analizar quien presenta un nivel mayor de incubación viral, y descartar a pacientes sanos.
“A la gente le va a dar gripe con dolor de garganta y fiebre, lo que no significa que sea un cuadro de insuficiencia respiratoria. Ante ello, es recomendable que se acerquen al hospital sólo cuando presenten una dificultad severa para respirar, y no cuando estén con el primer síntoma porque si no tienen influenza, lo más probable es que contraigan el virus en el hospital”, enfatizó la seremi.
Campaña anti influenza
El jueves fue la última salida a terreno de los equipos de vacunación al cierre de la campaña 2009. Por orden de la Presidenta Michelle Bachelet, y pensando en la posible pandemia, el plazo para la aplicación de las dosis se extendió una semana. Así, a contar del lunes se retomará la campaña, aunque sólo en los cinco consultorios de atención primaria.
En cuanto al stock de vacunas, Banciella comentó que “en los consultorios prácticamente van quedando las dosis de los niños, las de adultos quedaban muy pocas”.