
Y es que la poca convocatoria que tuvo el acto es una tendencia que se viene dando desde hace varios años en la región. A pesar de esto y con media hora de atraso, las máximas autoridades de la CUT dieron el puntapié inicial a este día con un extenso petitorio que incluyó puntos relevantes como un nuevo sistema de previsión pública con garantía estatal, el fin de los despidos por “necesidades de la empresa”, varios cambios a la Constitución, el fortalecimiento de la educación pública, el fin al reemplazo en la huelga y la ampliación de la negociación colectiva, entre otros.
El presidente regional de la multisindical, Clemente Gálvez, señaló en el discurso que no se encuentran conformes con la legislación laboral, en este sentido, “la Presidenta (Michelle) Bachelet tiene una deuda con los trabajadores en general y esperamos, en el corto tiempo que le queda de mandato, pueda mejorar todos los temas que le quedan pendientes con nosotros”.
Acción de gracias
Para culminar la jornada, las máximas autoridades de la CUT junto a los trabajadores de la ciudad, participaron de una misa de acción de gracias en la catedral de Punta Arenas, presidida por el obispo Bernardo Bastres.
En la oportunidad, la autoridad religiosa hizo un llamado a los empresarios a no solucionar los problemas derivados de la crisis económica despidiendo trabajadores. “Ellos no tienen por qué pagar los platos rotos”, concluyó.