
El texto fue aprobado por 90 votos y quedó en condiciones de ser remitido al Gobierno para su promulgación como ley.
La iniciativa legal, modificará el Código del Trabajo para señalar que “el empleador deberá dar cumplimiento al principio de igualdad de remuneraciones entre hombres y mujeres que presten un mismo trabajo, no siendo consideradas arbitrarias las diferencias objetivas en las remuneraciones que se funden, entre otras razones, en las capacidades, calificaciones, idoneidad, responsabilidad o productividad”.
Además, añade que las denuncias que se realicen sobre este tema se sustanciarán una vez que se encuentre concluido el procedimiento de reclamación previsto para estos efectos en el reglamento interno de la empresa.
A su vez, la Cámara Alta puso la exigencia, en el caso de empresas de doscientos trabajadores o más, de tener un registro que consigne los diversos cargos o funciones de la empresa y sus características técnicas esenciales.