
Para finalizar esta serie de artículos, cuyo objetivo no ha sido otro que refrescar la memoria regional acerca de lo que es realmente el patrimonio, nos va quedando mencionar lo que ha sido tradicionalmente considerado como “el sueldo de Chile”, el cobre, “chilenizado” por Frei Montalva, “nacionalizado” por Salvador Allende y vuelto a entregar a manos transnacionales por Pinochet. En este caso específico, se ha estado favoreciendo el desarrollo de iniciativas privadas, que compiten con las empresas del estado en condiciones más favorables que las empresas públicas (léase de todos los chilenos). Las cifras no mienten, en 1990 la producción y exportaciones de las empresas nacionalizadas era más del 90 % y la privada, el 10 %; pues bien, en el 2006, habiendo aumentado en términos absolutos, la producción estatal cambia al 30% del total y el 70% es controlado por empresas privadas. Aún a pesar de ello CODELCO aporta mucho más recursos económicos al Estado de Chile que la suma de las empresas privadas; ¿cómo entender a los gobiernos que favorecen este regalo a las empresas extranjeras? ¿Habrá coimas más grandes que las de la compra de aviones y allí están calladitos? ¿Cómo se puede entender que en Chile, dos grupos económicos controlen el 100% de la Prensa Escrita de Cobertura Nacional; que tres cadenas de farmacias controlen el 90% del mercado de fármacos; que dos empresas controlen el 70% de los Cines de Chile; que las Empresas del Agua Potable privatizadas controlan el 97% de todos los usuarios de Chile; que dos empresas de generación eléctrica, controlen el 80% del mercado; que cuatro empresas de Salud Privada controlen el 75%; que 5 AFP controlen más del 90% de los fondos de pensiones y que situaciones parecidas se produzcan con los: Supermercados, Seguros, Teléfonos, Empresas Forestales, de Celulosa y Papel, Transporte Aéreo y Terrestre? Cuando el rol del estado debería tener como política permanente la protección y promoción de las artes, la industria y los productos chilenos, en forma descentralizada y desconcentrada.