
La convocatoria fue realizada por el Automóvil Club de Río Grande, institución que tiene la mayor responsabilidad organizacional en esta edición, ya que la competencia automovilística se inicia y termina en esta localidad Argentina.
El presidente de la institución tuerca transandina, José Viola, manifestó que “es importante llegar hasta Punta Arenas para dar a conocer los aspectos generales de la prueba y las modificaciones que se puedan aplicar. Ésta es una ciudad que aporta con un buen número de pilotos a la competencia, los cuales son de muy buen nivel”.
Viola nuevamente hizo un llamado a los competidores a respetar las leyes del tránsito vigentes en ambos países, ya que ésta es una prueba binacional, que se disputa por caminos internacionales e interprovinciales de Chile y Argentina, por lo que el reconocimeinto de rutas debe realizarse con mucha prudencia, para prevenir accidentes.
Una de las medidas que las autoridades de la prueba desean instaurar para este año, dice relación con el reconocimiento de rutas. La intención de los organizadores es distribuir los días pares e impares, según el calendario, para pilotos chilenos y argentinos según corresponda.
Esta situación es bastante dificil de aplicar, pues los caminos son de libre tránsito y no se puede restringir el tráfico vehícular en caminos de uso público.