Es indudable que Antonio Muñoz es una persona con suerte. En los últimos días ganó cerca de $ 12 millones jugando en las máquinas del casino. Y lo más sorprendente es que lo consiguió en días consecutivos. Toda una hazaña.
El afortunado es un hombre de familia. Con 65 años, es padre de cuatro hijos y ya tiene tres nietos a quienes, asegura,  adora. Se siente favorecido en todos los aspectos, no sólo en el juego.
Sus compañeros de trabajo lo describen como una persona sociable y cariñosa. También es apreciado en el café Vegalafonte, lugar al que Muñoz acude religiosamente todos los días.
“Siempre se ubica en la esquina del fondo y pide lo mismo: un café cortado simple. Es todo un caballero, siempre nos trata con amabilidad. Lo único es que no deja propinas; ojalá que ahora que ganó comparta su suerte”, comentó entre risas una de las señoritas que atiende en el local.
Muñoz reconoce que es un tipo afortunado. “Me sorprende esta racha de suerte, no todos los días son iguales. Pero yo a veces tengo el presentimiento de que voy a ganar algo, pensando que me va a ir bien, pensando positivo y decido ir”, dijo seriamente.
Golpe de suerte
El lunes, cuando Muñoz obtuvo el mayor premio entregado en el casino Dreams, confiesa que el llamado de la suerte llegó inesperadamente.
“Estaba el lunes en el café Vegalafonte y eran las cuatro de la tarde (16 horas). Me di cuenta de que no tenía nada que hacer; pensé en ir y me sentí con confianza. Así que fui al casino”, recuerda.
A pesar de haber ganado más de $ 3 millones durante el fin de semana, Muñoz no se “volvió loco” y sólo llevó una pequeña fracción del dinero que ganó en los días previos.
“A las 6 de la tarde (18 horas) sólo me quedaban $ 14 mil en el bolsillo, ya había perdido $ 150 mil. Me estaba yendo, incluso había dejado un poco de dinero para el estacionamiento, pero tenía aún la esperanza de ganar algo ya que sentía la sensación de que iba a pasar algo, además las máquinas del casino emitían un ruido medio extraño, fuerte y anormal.  Yo estaba tan concentrado en jugar que no percibí lo que pasó en ese instante, hasta que una amiga que estaba sentada al lado me dijo: ‘oye, Antonio, te sacaste los $ 9 millones’. La verdad  no me di cuenta y seguía apretando el botón”, contó entre risas el hombre más afortunado del momento.
Inmediatamente, el suertudo llamó a su señora para contar que había ganado nuevamente, pero, esta vez, el mayor premio que ha entregado el casino de Punta Arenas.
“Mi señora estaba contenta; no podía creer que había ganado”, cuenta con emoción.
Luego de recibir el premio, Muñoz llamó a uno de sus hijos para que lo acompañara hasta su casa con el jugoso botín.
Siempre afortunado
No es primera vez que la suerte toca la puerta de este afortunado hombre. Según cuenta, ha ganado premios en juegos de azar.
“Recuerdo que hace varios años, quizás el 78,  una persona pasó por mi trabajo de ese tiempo ofreciendo una rifa a beneficio de la Sociedad Rural de Magallanes. Una colega que estaba al lado mío iba a comprar el número que es mi predilecto, así que hasta ese instante no iba a comprar. Por suerte, encontró el billete muy caro. Así que yo lo compré. Cuando leí los resultados del sorteo en el diario, no lo podía creer, ¡me había ganado un auto nuevo!”, relató.
Señala además que también ha ganado otros premios, aunque no son tan grandes como los obtenidos en el casino y la rifa. “He ganado en el Loto, aunque no los seis números, pero he estado cerca... ¿quién sabe si algún día gano el premio mayor?”, narra,
desafiando al azar.
El beneficiado también dice que para apostar, hay que ser prudente.
“Ya aprendí a jugar; si gano me voy, no me quedo. Amigos míos ganan y se quedan para llevarse más plata y luego pierden todo lo que habían obtenido. Yo aprendí. A mi me pasaba lo mismo”, confiesa con serenidad.
También tiene la convicción de que el apostador tiene que estar absolutamente concentrado en el juego para obtener resultados, ya que estima que la suerte es sólo un factor para ganar.
“Una vez en el casino un  buen amigo me dijo ‘yo vengo a entretenerme’, pero yo no estoy de acuerdo con eso y le respondí que yo vengo a ganar. Para entretenerme salgo con mi familia a  pasear a alguna parte o veo TV”, relata como todo un profesional del juego.
Otra receta para ser un ganador en el juego es alejarse de la gente que no comparte la suerte de los demás, asegura.
“Uno tiene que estar con ánimo positivo y alejarse de las personas que dan malas vibras. Cuando se acercan yo me levanto, me fumo un cigarro y espero a que se alejen para volver a jugar”, afirmó el exitoso jugador.
Pese a que le pedimos que nos contara algunas de sus técnicas para el juego, el avezado apostador afirma que es secreto profesional, pero que quizás, en otra entrevista a Diario El Pingüino, las revelará.