
A primeras horas de la mañana, pese al frío reinante, en la población Aves Australes habíamos algunas personas esperando colectivo, también se encontraba una señora con muletas, al fin paso uno de la línea 220 que lo detuvimos para que ingresara la señora por su condición de minusvalía. El chofer contesto que tenía que cumplir con todo el recorrido por lo tanto ir a dar la vuelta hasta el final, lo que es correcto, pero al volver había un señor en el asiento que acompaña al conductor, que al solicitarle que tuviera la gentileza de pasarse al asiento posterior para facilitar el acceso de la señora con dificultadas y muletas, se molestó, por lo tanto hubo que hacer subir a la señora en la parte posterior con lo dificultoso que es para una persona sana, hay que imaginarse lo que es para quien no está en condiciones de subir rápido y además ingresar los elementos que le ayudan a movilizarse.
Un poco de criterio hubiese permitido que la señora subiera en el asiento de adelante y acompaña al chofer hasta dar su “vuelta” evitando así que una persona suba la inclemencia del clima y además pueda viajar mas cómoda.