Diez de años de cárcel es la pena que el fiscal Gonzalo Aranda y el querellante Marcelo Figueroa está pidiendo para Carlos Bórquez Soto, de 58 años, quien en septiembre del año pasado agredió brutalmente a su madre y la quemó.Ayer comenzó el juicio oral en contra de Bórquez, defendido por el abogado Julio Urra, quien al comienzo renunció al derecho de prestar declaraciones. La tesis de la defensa es no cuestionar la ocurrencia de los hechos ni la participación de su cliente, pero sí validar la teoría de que es un paciente siquiátrico. “No podemos soslayar que desde los 13 años presenta problemas mentales”, dijo Urra. “Incluso dos meses antes del parricidio frustrado habían informes que daban cuenta de la enfermedad y nadie hizo nada”, señaló el abogado. La agresión ocurrió el 9 de septiembre y quedó al descubierto cuando una de las hijas, Josefina Bórquez, se dirigió a la casa de su madre, Elba Soto Pérez, de 83 años, y se encontró con la brutal escena.
Bórquez siempre protagonizaba escenas de violencia, pero esta fue la más graves de todas. Ayer prestaron declaraciones seis personas, partiendo por el siquiatra Juan Vukusic y un nieto de la víctima. El juicio debiera concluir hoy.
