
Los jueces castigaron severamente al inculpado por tratarse de una persona que anteriormente fue condenada por igual delito y por lo mismo, al no reunir los requisitos que exige la ley, la pena deberá cumplirla con cárcel efectiva.
Según el extracto de filiación y antecedentes personales, Fernández Chaval registra una condena (26 de enero de 2004) como autor de un delito de robo con intimidación, donde fue castigado a cumplir una pena de cuatro años de presidio.
Después, el 3 de julio de 2008, la justicia lo sentenció a 61 días de presidio como autor de un robo de especies en bienes nacionales de uso público. Y el 12 de enero de este año fue condenado por cometer un delito de hurto de especies.
De acuerdo a los testimonios y pruebas que presentó el fiscal Eugenio Campos Lucero en el juicio, para los jueces quedó acreditada la participación del acusado en el robo del 22 de abril.
Ese día, aproximadamente a las 17.00 horas, Fernández Chaval en compañía de un amigo, llegó a una casa de avenida Canal de Chacao, población Archipiélago de Chiloé, donde ingresó al patio y luego, escalando una ventana del baño ubicada en la parte posterior, llegó al interior del domicilio de Carlos Estrada Carrillanca.
Una vez dentro procedió a registrar las piezas de la casa y a seleccionar lo que iba a robar, como un televisor, un dvd, cds, equipo de música, ropas, entre otras cosas, las que estaban dentro de un cobertor de la cama.
En ese momento llegó el dueño de casa, quien regresaba al hogar, sorprendiendo in fraganti al ladrón cuando salía de un dormitorio y al preguntarle por su presencia le dijo que su tía le permitió el ingreso.
El afectado opuso resistencia y produjo un forcejeo entre ambos, pero el antisocial utilizó un destornillador para inferir una lesión a Estrada quien en esos momentos se defendía y pedía ayuda telefónica a Carabineros. En el intertanto el socio de Sebastián Fernández arrojó una piedra y procedió a quebrar uno de los ventanales del frontis de la casa habitación, pero en esos momentos justo llegó Carabineros. El amigo huyó y Fernández fue detenido.
La versión que entregó el afectado en el juicio fue que el acusado se abalanzó sobre él, con el destornillador, que forcejearon en el dormitorio y que sobre la cama habían varias especies seleccionadas, las que estaban listas para llevarse dentro de un cobertor de la cama. Mientras forcejeaban el delincuente le dijo a la persona que estaba esperando afuera que debía matarlo, que iba a inventar que estuvieron bebiendo en el interior. El sujeto que estaba en el exterior tomó una piedra y rompió un vidrio de la ventana del living para sacar las especies, la misma que alcanzó a utilizar la víctima para golpear al acusado en la cabeza y reducirlo hasta que llegó Carabineros y lo llevó detenido, dejándolo con una herida contuso cortante cuero cabelludo de mediana gravedad, según el informe del Servicio de Urgencia extendido a nombre de José Alejandro Traba Fernández, nombre con el que el acusado se identificó ante la policía uniformada.