“Mi madre me entregó la piocha al graduarme en la Escuela de Suboficiales y ahora está presente en mi última distinción, la de suboficial mayor”, dijo emocionado al término de la ceremonia de ascenso el jefe de la Central de Comunicaciones de la Prefectura de Magallanes, Ricardo Lara Bello. Asimismo, al cumplir 30 años en Carabineros de Chile, obtuvo la medalla “Honor y Lealtad” junto al suboficial mayor Héctor López López y Ricardo González Sepúlveda, quien se encuentra en comisión de servicio en la Base Antártica “Bernardo O’Higgins”.
La ceremonia donde se conmemoró el Día del Suboficial Mayor, grado con el que se enviste al Personal de Nombramiento Institucional como culminación de una meritoria carrera profesional, fue presidida ayer por el general Hero Negrón (en la foto).
El grado de suboficial mayor lo reciben luego de 25 años de servicio activo y después de un perfeccionamiento académico y profesional en la Escuela de Suboficiales de Carabineros.
Los funcionarios de este grado, a quienes se les conoce cariñosamente como “los generales chicos”, actúa como nexo entre el mando y el personal subalterno y su papel es clave en la dinámica operativa policial.