
Los beneficiados, que se desempeñan en las áreas de repostería, aseo industrial, confección y soldadura, entre otros, son parte incluso de la población penal, ya que tres de ellos están internos y otros siete se encuentran sujetos a medidas alternativas a la reclusión.
A su vez, otras cinco personas pertenecientes al Fondo Nacional de la Discapacidad podrán desarrollar sus ideas de negocios, a través de una inversión total para esta iniciativa de $ 27.500.000.