El pequeño “Carlitos” volvió ayer a tribunales donde esta vez fue formalizado por el delito de daños. Con apenas 16 años es conocido en las redes de protección del Sename donde le han brindado todo tipo de ayuda para sacarlo del “hoyo” en que está desde muy chico.
Pero como dice el director del Sename, César Montiel, “este niño presenta una conducta oposicionista que impide obtener resultados favorables”. Por lo mismo es difícil rehabilitarlo. “Carlitos” es uno de los casos calificado de “alta complejidad dentro de la red”.
“Estoy en la droga”
Ayer este menor fue presentado al juez de Garantía por el fiscal jefe Juan Agustín Meléndez, debido a que el domingo, alrededor de las 20 horas, tomó un cinturón y con la hebilla golpeó un taxi a las afueras del Mall Pionero Urbano, provocando daños por 300 mil pesos. Lo formalizaron por daños fijándose un plazo de 30 días para el cierre de la investigación, y deberá firmar todos los sábados en la fiscalía.
Para “Carlitos” es tal vez un caso más de las acciones que es capaz de cometer bajo los efectos de la droga. Y así lo confesó a Diario El Pingüino que conversó con él al término de la audiencia.
Con una imagen maternal y paternal ausente, este niño desertó del sistema educacional en octavo básico y hoy deambula de un lado para otro, sin nada claro, salvo refugiarse en la droga. Aunque en la audiencia señaló otra cosa, dice que vive con su padre en Playa Norte, quien nunca supo que el hijo fue detenido el domingo en la tarde y que ayer recuperó la libertad.
Sobre el delito que cometió confiesa que no recuerda nada. “Lo que pasa es que andaba volado porque siempre le hago a los solventes, desde hace mucho tiempo, y lo del domingo ni lo recuerdo”.
Aunque admite saber que esto le hace daño indica que no puede salir del consumo, el mismo que ahora practica con su “polola”. Y como un gran avance llama la atención escucharlo decir que dejó los aerosoles. Es sincero en señalar que “a la droga le hago con todo, lo que venga, marihuana y pastillas, pero dejé el Poett (se refiere a los desodorantes ambientales). Confiesa que hace seis meses no asiste al tratamiento que estaba recibiendo por parte del Servicio de Salud.
Cuando le consultamos sobre lo que opina su madre de todo esto, responde que está presa, y cuenta que tiene otro hermano, que también se encuentra privado de libertad cumpliendo una condena por homicidio frustrado.
Por el año 2004 “Carlitos” hizo noticia cuando cursaba la enseñanza básica en la escuela Croacia y en su favor se interpuso un recurso de protección, porque la dirección del establecimiento le había caducado la matrícula, debido a conductas transgresoras. La justicia sancionó el caso a favor del alumno y el establecimiento lo tuvo que reintegrar.