
El jefe regional de la Policía de Investigaciones (PDI), Carlos González Hoffens, formuló un llamado de atención a los padres porque a su juicio “es impresionante el consumo de alcohol de menores de edad en las noches”.
Desde su llegada a Punta Arenas siempre se le ha visto como un “hombre en terreno”. Le gusta salir a patrullar con su gente y empaparse de los delitos “in situ”. No le gusta que le cuenten lo que está sucediendo en la calle y, en la semana, recorre a pie el centro de la ciudad conversando con quien se le acerque a saludarlo.
Ayer patrulló hasta pasadas las 4.00 horas de la madrugada, labor que incluyó la participación de todas las unidades especializadas de la PDI y los resultados los entregó él mismo: un total de 224 controles de identidad y siete personas fueron detenidas por órdenes pendientes con la justicia.
Prostitución infantil
Lo que más llamó la atención fue la detención de un adulto por el delito de “facilitar la prostitución de menores”. En un local de calle Independencia la policía encontró a una niña de 16 años, vestida con muy poca ropa, acompañada de otra joven de recién cumplidos 18. El regente se limitó a señalar que no conocía a las jóvenes y que menos sabía lo que estaban haciendo en el local. El fiscal de turno ordenó la libertad del sujeto, pero posteriormente será formalizado, siempre que los antecedentes así lo ameriten.
Esto último es preocupante, dijo González, “porque estamos en presencia de muchos casos de abuso sexual y por lo mismo estamos promoviendo la instalación en Punta Arenas de un Centro de Asistencia a Víctimas de Atentados Sexuales”.