Un teléfono satelital, un computador portátil, un IPod y un par de relojes fueron los artículos principales que desconocidos robaron en la casa del cónsul de Gran Bretaña en Punta Arenas, John Rees.
El propio afectado señaló que fue su esposa, la que al regresar a la casa, después de las 17 horas, encontró que en uno de los dormitorios había desorden y claramente esto dejaba al descubierto que habían ingresado a la vivienda, por una puerta mal cerrada que no les costó mucho abrirla.
Rees agradeció que fueron pocas cosas las que se llevaron y, además, que en la casa no tienen artículos de gran valor.
La denuncia la tomó la Brigada de Robos de la Policía de Investigaciones, detectives que se constituyeron en el domicilio del diplomático para realizar los primeros peritajes. “Lo que más me duele es mi Ipod con siete mil canciones”, lamentó Rees.