
Nada entendían los extranjeros sobre la situación que están atravesando estos trabajadores y que esperan solucionar próximamente. Lo cierto es que ellos vieron cómo un grupo de hombres y mujeres agitaban banderas, mostraban pancartas y hacían ruido con silbatos.
El presidente regional de la Asociación Nacional de Funcionarios de la Dirección General de Aeronáutica Civil (Dgac), Dalivor Eterovic calificó la instancia como “exitosa” y explicó que “logramos hacer la manifestación con la magnitud que esperábamos. Retrasamos una hora la partida del vuelo comercial más importante de la mañana”.
Asimismo, reconoció que hubo pocas salidas programadas porque “el hecho de que se haya informado ayer (el jueves) sobre la movilización, motivó que no se programaran más vuelos”.
Lo más rescatable para los funcionarios es que consiguieron que el subsecretario de Aviación, Raúl Vergara, confirmara una reunión con los dirigentes nacionales de la Dgac para el próximo lunes.
“Creemos que se abre una nueva posibilidad para que envíen el proyecto de ley al parlamento”, expresó Eterovic.
No obstante, añadió que “dependiendo del tenor de la conversación vamos a decidir qué medida podremos tomar. En todo caso no descartamos un paro total de las funciones”.
Atochamiento
Los funcionarios advirtieron con anterioridad que su movilización se desarrollaría desde las 7.00 horas hasta las 14.00 horas y que iba a producir retraso y relentización en los abordajes de los vuelos nacionales e internacionales. Y eso fue lo que ocurrió ayer (ver página 31).
“La salida fue habitual en los casos de los vuelos que despegaron antes de las 7.00 horas de la mañana, con los servicios completos tal como se establece dentro de la norma de seguridad”, afirmó el jefe de Aeropuerto, Daniel Aravena.
Uno de los primeros conflictos se generó justamente a esa hora, porque el vuelo que estaba programado a las 7.00 horas, despegó minutos antes y un par de pasajeros no alcanzó a abordar, lo que causó sus reclamos y disgusto.
Pero la aglomeración más notoria se generó alrededor de las 10.15 horas cuando comenzaron a congregarse las personas que tenían comprado su pasaje para viajar a las 10.45 horas.
“Espero que no se retrase tanto para que no me afecte. Todavía estoy dentro del tiempo de espera normal. Hay que ver qué pasa”, manifestó Carlos Montecinos.
Algunos se mostraron más preocupados porque tenían compromisos laborales que atender, los que debieron ser suspendidos ante la imposibilidad de realizar el traslado aéreo como se tenía programado.
“Estoy llamando al trabajo para avisar que voy a llegar más tarde porque aquí están en paro”, expresó Pedro Barría.
Otros tantos lamentaban la impresión que se iban a llevar los extranjeros de su paso por Chile y, más específicamente, por Punta Arenas.
La razón que los llevó a realizar el paro nacional, es que las pensiones que comenzarán a recibir los funcionarios que están más próximos a jubilar son muy bajas, debido a que los perjudicó gravemente el cambio que se produjo en 1985 desde la Caja de Previsión de la Defensa Nacional (Capredena) a las AFP. Asimismo, aseguran que gran parte del sueldo que reciben está compuesto por bonos y bonificaciones, lo que no es imponible.
Para solucionar esa situación trabajaron en un proyecto de ley junto con el Ministerio de Defensa, que busca que los empleados de la Aeronáutica vuelvan a ser parte de Capredena, sin embargo el Ministerio de Hacienda no aprobó la idea y el documento no ha podido llegar al parlamento hasta la fecha.