
El joven de 21 años, Andrés Esteban Coronado Huala, quien en la madrugada del sábado fue atropellado por un taxi colectivo en la intersección de avenida Eduardo Frei con Manantiales, permanece estable dentro de su gravedad.
El médico de turno de la UCI del hospital regional, Héctor Godoy, informó que “el paciente se encuentra estable, ventilando espontáneamente. No está séptico ni presenta infecciones hasta el momento. Si bien tiene un gran hematoma en la región costal derecha, está orientado, despierto y responde a órdenes”. Producto del accidente, Coronado resultó con una fractura expuesta de fémur izquierdo y de muñeca. Fue llevado a pabellón y se le colocó un tutor externo en la pierna afectada y una osteosíntesis en la muñeca, a la altura del radio.
En tanto, Jorge Eduardo Cárdenas Hernández, el joven que fue arrollado en la intersección de Eusebio Lillo con José Argomedo, sigue con diagnóstico grave y riesgo vital. El doctor Godoy indicó que “está séptico, con falla orgánica, problemas respiratorios, una infección pulmonar agregada y falla renal aguda a consecuencia del politraumatismo, por lo que está en hemodiálisis”.
El facultativo dijo que el paciente hemodinamicamente se mantiene por momentos inestable y continúa en ventilación mecánica, con altos requerimientos de oxigeno, con pronóstico reservado.