La Ley de Fomento a la Inversión Privada es regulada por el Ministerio de Agricultura con la finalidad de invertir y de esta forma bonificar proyectos de riego con fines agrícolas en Chile. En el marco de esta acción, se encuentra en Magallanes, el secretario ejecutivo de la Comisión de Riego de la cartera, Nelson Pereira, quien dio a conocer ayer en Pingüino Radio una excelente noticia: las cámaras de Senado y de Diputados, aprobaron la normativa prorrogándola por 12 años más.
Esta norma, que culminaba su vigencia en enero de 2010, contempla también un aumento en la entrega de fondos para el desarrollo de propuestas, que llegaban a un 70% como máximo y desde el próximo año llegarán al tope de un 90%. “Se augura una positiva respuesta para los agricultores el próximo año”, recalcó Calderón.
Los mayores beneficiados con esta modificación serán los agricultores menores de la zona y del país, quienes están constituidos en “la pequeña agricultura familiar campesina”, explicó la seremi de Agricultura, María Elizabeth Muñoz, sin dejar de mencionar que los medianos y grandes trabajadores del área no dejarán de gozar beneficios por medio de dicha ley.
Sin descartar que los productores magallánicos hayan tenido problemas en el acceso a la bonificación, el representante de la cartera comentó que ello se debe a la carencia de consultores especialistas en la materia, que preparen y presenten los proyectos de los emprendedores. Otro de los factores que influyeron en este caso, según el funcionario del agro, fue la falta de claridad y regularización de los derechos de agua. “Por eso, la comisión hizo un convenio con la Seremi de Agricultura, hicimos un curso e iniciamos un programa para identificar a agricultores con problemas”.
El desarrollo de ideas en este ámbito, también ha tenido su evolución, pues a través de estudios realizados por organismos como el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (Inia), han establecido que “con el riego se aumentan los rendimientos”, aseguró Calderón, quien afirmó además, que con esta técnica “se posibilita la plantación de nuevos cultivos de mayor rentabilidad y mucho más competitivos”. Como ejemplo, citó al ruibarbo y la zarzaparrilla, recordando además, que la pradera en esta época aumenta el material seco.