
Desde el año 2006, con la puesta en marcha el proyecto CRA (Centro de Recursos del Aprendizaje) los esfuerzos se han unido. Con el apoyo de los padres, la entidad habilitó una biblioteca que hoy cuenta con 3.117 textos y lo más importante, un creciente deseo de los menores por sumergirse en el fascinante y enriquecedor mundo de los textos.
Una asistencia promedio de 30 alumnos a la biblioteca en cada recreo, es una muestra clara del interés por descubrir y acercarse a la lectura. “Prefiero venir acá, porque no hay ruido como en el patio. Y porque quiero mirar los libros y leer. Me gustan los de dinosaurios. Acá me entretengo”, dijo el Marco Masle Lavado, de 6 años de edad y alumno de Primero B.