
Ayer, y como lo hacía todos los días, se levantó muy temprano para ir a trabajar. Salió de la casa, pero a la Cuarta Brigada Aérea nunca llegó, lo que despertó la inquietud de sus compañeros de trabajo, quienes llamaron por teléfono para preguntar por él.
Esto alertó a sus cercanos que iniciaron una búsqueda desesperada después de ver que el uniforme estaba en casa. Lo salieron a buscar y cuando se dirigieron al garaje de la casa lo encontraron colgado.
La víctima atravesaba por un fuerte cuadro depresivo debido a lo cual estaba recibiendo tratamiento médico, aparentemente debido a problemas originados en la separación y en asuntos económicos. Pero aunque estaba siendo visto por un especialista, sus cercanos y colegas, dijeron que nada hacía pensar que pudiera tomar una decisión tan drástica.
Al uniformado le sobreviven dos hijos, uno de los cuales tiene 16 años y fue informado en clases de la infausta noticia.