
Su popularidad quedó ratificada con esa respuesta del público. Fue el más aplaudido de todos los pilotos de la categoría y el que mas fotos y autógrafos debió regalar al público.
Cuando la presentación terminó, y mientras el resto de los pilotos pasaban un momento en la carpa VIP, que estaba detrás del escenario, él continuaba con la gente. Tal fue el entusiasmo que provocó entre los espectadores que tuvo que salir de la zona, escoltado por seis personas.
Claro que también estuvieron aquellos que no le tienen mucha simpatía. Eso se pudo comprobar cuando salió con su Top Race para hacer algunos trompos. Se escuchó algún que otro insulto. Como todo ídolo genera pasiones encontradas. Este año Marcos Di Palma apuesta todo al Top Race, que será la única categoría en la que competirá. Era una idea que tenía desde hace tiempo y que tomó forma definitiva a fin del 2009 cuando anunció su alejamiento del Turismo Carretera.