A pesar de que Magallanes fue una de las regiones privilegiadas, porque no sufrió el terremoto ni el tsunami, un gran porcentaje de los habitantes reaccionó casi como si lo hubiese vivido y partió directo al supermercado a comprar. Esta actitud no generó desabastecimiento ni mucho menos, pero sí en algunas oportunidades, debido a este mismo hecho, las estanterías no estaban tan llenas como de costumbre. Claramente esto obligó a los locales a estar alerta, pero según los ejecutivos no llegó a un nivel en que se vieran en problemas con sus clientes ni proveedores. “Las personas actuaron en el sentido de asegurar sus víveres. Probablemente ante lo sucedido en el resto del país, prefirieron actuar con anticipación. Pero la verdad es que nosotros no tuvimos problemas para contar con los productos. Hemos estado abasteciendo y coordinando todo con nuestros proveedores”, manifestó el gerente del hipermercado Lider, Gustavo Barros.
Una situación similar se presentó en los supermercados Unimarc, desde donde afirmaron que no tuvieron problemas con la variedad y cantidad de alimentos.
“El traslado de mercadería ha tenido un grado menor de demora producto de la eventualidad. Cabe mencionar que el 80% de los productos que vendemos son entregados por proveedores locales, los que contaban con los stock de seguridad necesarios para enfrentar la emergencia, por lo que no hemos sufrido ningún tipo de desabastecimiento”, aseguró la encargada de comunicaciones de Unimarc, Daniela Espinoza.
El resultado de la desesperación de algunas personas durante “los primeros días después del terremoto, hizo que se notara un refuerzo en las compras de productos de línea básica, como detergente, azúcar, arroz, aceite, entre varios otros”.
Pero este escenario ya se habría normalizado según el ejecutivo, registrándose nuevamente las ventas promedios.
“Estamos volviendo a las ventas parejas, con la participación de las distintas áreas de productos en su nivel normal. Esta semana todo debería volver totalmente a la normalidad”, agregó Barros.
Estas visitas constantes a los supermercados generaron una mayor ganancia en comparación a la misma fecha del año pasado. Sin embargo, según Barros, no fue tan sustantiva.
“No me atrevería a dar una cifra, pero sí hay una tendencia al alza. No se puede negar que durante más o menos una semana se registró un comportamiento distinto de los clientes”, expresó el representante de Líder.
La encargada de comunicaciones de supermercados Unimarc, estimó que el incremento en las ventas se debe principalmente a la gran cantidad de aportes que ha enviado la región a las zonas afectadas.
“Las ventas se han mantenido en ascenso impulsadas por la gran ayuda que han dado los magallánicos a las zonas afectadas, y por la llegada de numerosas familias que regresan de sus vacaciones a comenzar el año escolar. El miedo al desabastecimiento ya no es un tema relevante ya que afortunadamente nunca vivimos tal fenómeno en la zona”, expresó Espinoza.
Han transcurrido 12 días desde la catástrofe y cada día las empresas dan un paso adelante con el restablecimiento de sus servicios. En Magallanes no debería continuar ni surgir ningún tipo de desconfianza, puesto que pasaría a ser exageración.