No sólo los escolares volvieron al colegio, los jardines infantiles también abrieron sus puertas para recibir a los párvulos en un nuevo año de actividades y enseñanza lúdica. La Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji) estipuló dos fechas para el comienzo de las clases. Una para los niños que por primera vez acuden a estos establecimientos y otra para los antiguos. “Hay un período flexible de adaptación donde todo el ambiente está destinado a los niños y a las familias que nunca han participado de este proceso. Por ejemplo, existe un horario en que las mamás pueden traer a sus hijos un poco más tarde o se pueden quedar en las aulas un tiempo más prolongado con los menores”, explicó la educadora de párvulos del Jardín Infantil Las Charitas, Patricia Toledo.
A su vez, se realiza un trabajo específico con las madres primerizas que llevan a sus hijos a las sala cuna, puesto que el desapego no es un tema fácil para ellas.
“Hay un período de adaptación para las madres, ya que muchas veces es primera vez que los hijos se desvinculan del entorno familiar. Tenemos que ganar su confianza a través de una conversación íntima, crear lazos de seguridad y de afecto”, agregó la profesional.
A pesar de que los párvulos antiguos ya hicieron su ingreso el lunes pasado, este proceso de acostumbramiento para las familias nuevas continúa hasta que se asuma la nueva rutina.
Pero los niños son los principales destinatarios de este trabajo de adaptación, así que por un tiempo se les permite llevar al recinto elementos personales de apego y se les realizan diversas actividades de entretención para hacer más atractiva su experiencia en el jardín infantil.
Las Charitas cuenta con su dotación completa y ya está pensando en un curso de perfeccionamiento. Aspecto fundamental para las profesionales que trabajan en el establecimiento.