Un grave daño patrimonial y emocional sufrió ayer la familia Caipillán Cárdenas de Punta Arenas, luego de que la rotura de una caudalosa cañería de agua potable ocasionara el anegamiento de la vivienda.
Sobre el hecho podría pensarse que fue un lamentable infortunio, sin embargo es segunda vez que le ocurre a la misma vivienda, y en esta oportunidad, con consecuencias mortales.

Mortal
Sí, porque ahora la inundación ocurrida en la mañana de ayer en avenida Brasil, a la altura del Nº 1702, en el barrio Monseñor Boric de la población 18 de Septiembre, ocurrió cuando el matrimonio se había marchado a trabajar y la casa quedó sola.

Sus hijos, fueron pasados a dejar a la casa de familiares y los únicos que quedaron en la vivienda fueron una perra, con sus dos cachorros en una casita de mascotas ubicada en el antejardín del inmueble anegado.
Tal fue la rapidez con que ingresó el agua, luego de que se rompió la cañería, que la perra no tuvo la posibilidad de evacuar a sus cachorros a un lugar seco, y vio cómo sus crías se ahogaban.
Por otra parte, los vecinos del sector que pasaban frente a la casa, a eso de las 9.30, se extrañaron de no ver ningún intento de aminorar los efectos de la inundación en la vivienda.
Golperon fuerte la puerta, percatándose que la familia dueña de casa perdía gran parte de sus enseres sin saber lo que ocurría.

De alguna forma contactaron al matrimonio compuesto por Patricia Cárdenas y Carlos Caipillán, quienes al ingresar a la vivienda, vieron una capa de agua que cubría el recién instalado piso flotante, además de estropear varios electrodomésticos, ropa de cama, enseres en todas las habitaciones.
Por eso la rabia de esta familia era comprensible, ya que además de perder las mascotas de sus hijos, por segunda vez le ocurría un hecho similar.

 En agosto pasado, también perdieron parte importante de los enseres de su vivienda, y el hecho de ayer es el reflejo de la responsabilidad de las empresas que han intervenido en el sector. Por una parte, la constructora Salfa, empresa que pavimentó avenida Brasil, y por la otra, Aguas Magallanes.