
De cierta manera, los habitantes de la Región de Magallanes y Antártica Chilena estamos acostumbrados a soportar la lluvia, viento, nieve y bajas temperaturas. Sin embargo, existen lugares en donde las condiciones climáticas son más crudas.
Hace ocho años que Juan Vargas y su señora residen en el sector de Pampa Redonda. Si bien considera el lugar como muy tranquilo, existen ciertos problemas con los que deben lidiar diariamente, pero sobre todo en invierno.
“El camino es muy angosto. Más encima por estos días hay muchos camiones que suben en busca de ripio y lo rompen. Para poder andar tranquilo se debe contar con un vehículo a doble tracción y cuando es necesario deben utilizarse cadenas”, manifestó el hombre.
Asimismo, acotó que si bien ya cayeron las primeras precipitaciones y copos, los meses más complicados son julio, agosto, y septiembre, aunque él ya comenzó a tomar algunas precauciones.
“A mis gallinas ya les hago fuego, porque de lo contrario no ponen huevos. También me aseguro con la leña, tengo bastante cortada. Respecto de la alimentación ya compramos alimentos para varios meses”, puntualizó Vargas.