Nuevamente un llamado anónimo al fono 134 de la Policía de Investigaciones (PDI) le permitió a la Brigada Antinarcóticos detener a cuatro personas portando marihuana del tipo paraguaya prensada. A partir de la información recibida iniciaron un trabajo de inteligencia policial lo cual les permitió llegar hasta un domicilio del sector sur de Punta Arenas, donde incautaron un total de 61 gramos de marihuana, droga que habían comprado poco antes a unos proveedores, los cuales posteriormente también fueron detenidos. Entre los cuatro aprehendidos dos cursan estudios universitarios en la Umag, según antecedentes que ellos mismos proporcionaron en la audiencia de control de detención, al término de la cual todos recuperaron la libertad.
Primeramente el abogado defensor del cuarteto intentó declarar ilegal la detención, pero la contraparte, el fiscal Oliver Rammsy, se opuso tenazmente argumentando que los antecedentes de la defensa no correspondían. En esta oportunidad el juez de turno, Juan Villa, compartió la postura de la fiscalía.
A continuación el fiscal formalizó (le comunicó a las cuatro personas que iniciaba una investigación en su contra) por el delito de microtráfico de marihuana paraguaya prensada.
Durante las diligencias, la Brigada Antinarcóticos estableció que uno de los detenidos registraba antecedentes penales por un hecho similar. Y, además de la droga, incautaron un vehículo que utilizaban para movilizarse y concretar las operaciones ilegales.
En dinero, a los detenidos les encontraron en su poder 700 mil pesos (en la fotografía), provenientes de la venta de la droga, un CPU y el monitor de un computador, lo que correspondería a un delito de receptación. El equipo lo guardaba uno de los distribuidores de la droga en su casa.