
“Desde la política del Ministerio del Interior y en relación a lo que el municipio quiere, la idea principal es instalar nuevamente el concepto de seguridad pública como un derecho, no como un bien”, destacó Castillo.
Para lograr esto uno de los principales desafíos es rescatar los barrios, pero no desde el punto de vista de sectores vulnerables, sino que en todas las áreas de la comuna, para que sean espacios aprovechados por las familias.
“Esto es un tema transversal, que incluye a todos los servicios y que hay que instalarlo. La seguridad va más allá de un alumbrado o de un vehículo policial, tiene que ver con el concepto de calidad de vida”, enfatizó el secretario.
Lo que busca Castillo es que no se consiga mayor sensación de seguridad a costa de que las personas estén encerradas en sus casas, sino que todos puedan salir de sus hogares con tranquilidad.