Molestia causó entre vecinos, en especial, entre los lectores de El Pingüino, el inicio de la fiscalización, por parte del municipio,  del cumplimiento de la Ordenanza Municipal Nº 117 de Aseo de la Comuna; esto es, de la limpieza y despeje de las veredas de la escarcha y la nieve.
Quienes incumplan dicha normativa, deberán pagar una multa que va entre un cuarto de Unidad Tributaria Mensual hasta 10 UTM.
Pero existen otras consecuencias que conlleva el incumplimiento de dicha norma: las posibles acciones legales en contra de los propietarios de los inmuebles si algún peatón llega a tener un accidente que implique atención médica, como por ejemplo, una caída con lesiones leves.
De ser así, la persona afectada debe dirigirse a Carabineros para que certifiquen que, a raíz de la escarcha y la nieve que estaban en determinado tramo de la vereda, y frente a tal número de la calle, no fue sacada por los dueños o habitantes del inmueble.
Esta situación puede ser utilizada como agravante, de interponer la “víctima” una demanda indemnizatoria o por indemnización frente a la justicia civil, es decir, en el Juzgado de Letras correspondientes, según explicó el director del Departamento de Operaciones de la Municipalidad de Punta Arenas, Sergio Becerra Díaz.
Poner el ejemplo
A raíz de aquello, muchos vecinos critican al municipio (leer, más abajo, el pinguino.com), pues si bien es cierto nadie pone en duda la necesidad de mantener limpias y despejadas las veredas, bandejones y aceras, la autoridad debe ser la primera en dar el ejemplo.
Así lo indicó la presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos, Rosa Zúñiga Ruiz, quien agregó que, como entidad, hicieron un llamado a las juntas de vecinos, a través de sus dirigentes, para que limpien el frontis y cumplan, así, con la ordenanza municipal. Pero, “el municipio, a parte de ser fiscalizador, debe ser el primero en cumplir con la norma”, dijo. Añadió que ella misma fue testigo de la caída de una persona en la intersección de calle Chiloé con Avenida Colón -a raíz de lo jabonoso del pavimento, producto de la escarcha-, en un sector que le corresponde a la municipalidad mantener en óptimas condiciones para su tránsito.
Respecto de los casos en que vecinos, ya sea por su edad (adultos mayores) o por problemas de salud o limitación física no puedan cumplir, por sí solos, con esta normativa, la dirigenta sostuvo que los vecinos “por lo general, han sido solidarios entre ellos”. Es el caso de los miembros de la Junta de Vecinos Río de la Mano (sector suroriente de la comuna). Su presidenta, Adela Cárcamo Oyarzo, destacó la actitud siempre colaboradora de los vecinos de este antiguo barrio, al igual que la constante preocupación por los adultos mayores. Son los primeros al momento de limpiar, después que ha nevado y los vecinos más cercanos se ocupan de despejar las veredas de aquellos más ancianos, según contó la dirigenta.