Alumnos del Británico se lucen en montaje teatral

General
03/07/2010 a las 17:30
Ante un gran marco de público se estrenó el nuevo espectáculo que el Colegio Británico ofrece a la comunidad magallánica: la versión en formato de musical del disco “The Wall”, original de la banda británica Pink Floyd.
Para ello los alumnos trabajaron durante un año, ... partiendo de una idea propuesta por un grupo de alumnos y que ha sido apoyada por el Rector Mr. John Harrison.
El guión es original y fue escrito por el alumno Ignacio Laínez en conjunto con el coreógrafo y bailarín Jorge Carvajal. Más de 100 alumnos están trabajando bajo la supervisión de Jorge Carvajal (Dirección Escénica), Sergio Pérez Bontes (Dirección Orquestal y Arreglos), Mario Espina (Dirección Coral y de Solistas), Lisette Jerez (Danza y Coreografías), Fernanda Violic y Eduardo Cartes (Escenografía), Rafael Cheuquelaf (Prensa y Audiovisual) y la Producción General de Paula Fernández.
Funciones
El jueves por la tarde se montó una función especial para estudiantes de enseñanza media de varios establecimientos educacionales, en donde los alumnos pudieron presenciar en vivo y en directo el magistral montaje de sus pares del Colegio Británico.
En tanto ayer se presentó la obra por primera vez para la comunidad magallánica, teniendo una notable recepción del público, ya que el trabajo realizado por los alumnos del Colegio Británico, demuestra la seriedad y dedicación que han puesto en el trabajo teatral, además de la gran producción que también corre por cuenta de ellos. Para hoy esta programada  la última función, abierta al público, a partir de las 20.30 hrs. en el Gimnasio del Colegio Británico. El ticket de entrada tiene un valor de cuatro mil pesos, el que puede adquirirse en la Secretaría del establecimiento (Waldo Seguel Nº 454). Las consultas pueden formularse al teléfono 223381 (anexo 100). Mayores antecedentes se pueden obtener en el sitio web www.britishschool.cl/thewall.htm
The Wall
“The Wall” retrata la vida de una estrella ficticia del rock llamada “Pink”, que desde su infancia ha acumulado traumas ocasionados por la muerte de su padre en la guerra, la sobreprotección materna, un sistema educativo opresor, fracasos sentimentales y la presión de ser una figura famosa en el mundo de la música. Todos convertidos por él en “ladrillos” de un muro que lo aisla del mundo y que termina conduciéndolo a un mundo de fantasía autodestructiva. Finalmente, durante un intento de suicidio en su alucinación se convierte en un dictador fascista, el polo radicalmente opuesto a lo que “Pink” siente y es, señalando el punto sin retorno a la locura. Luego, se celebra un “juicio” ficticio y simbólico contra “Pink”. Al final se dicta la condena de derribar el muro y exponerse al mundo exterior, en una liberación final que permite a “Pink” volver a “fluir”.

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