En la última y tradicional reunión que deben efectuar los directores de servicios de la Municipalidad de Punta Arenas con su administrador, David Pérez, también participó el alcalde Vladimiro Mimica Cárcamo, puesto que quería abordar un tema puntual que ha estado ocurriendo al interior del municipio y que el edil desea eliminar.
Al parecer, Mimica estaría molesto con que algunos directores manifiesten su opinión públicamente, cuando les parece que un par ha cometido desaciertos en el desarrollo de sus labores.
De hecho, lo que habría motivado a la máxima autoridad comunal a referirse a este tema en la cita, fueron las declaraciones que efectuó el director del departamento de Operaciones, Sergio Becerra, quien reconoció que el contrato con la empresa recolectora de basura, Servitrans, que comenzó a operar en mayo, “partió mal”, palabras que afectan a la unidad de Aseo y Ornato y Control de Contrato.
La recomendación que habría efectuado el edil a los directores es que, antes de dar declaraciones a los medios de comunicaciones, lo pusieran al tanto y tuvieran cuidado con las impresiones que emitan. A su vez, les habría manifestado que si hay problemas entre ellos, se hable de forma privada entre cada unidad.