Al borde de la muerte se encuentra el menor de 13 años, identificado con las iniciales N.C.N., quien al estar internado en la Unidad Hospitalaria de Corta Estadía (UHCE) del hospital regional, y bajo una -estricta- vigilancia del personal del lugar, intentara suicidarse anteayer. De acuerdo con los datos proporcionados por la madre del infante, Alicia Núñez, su hijo estaba recibiendo tratamiento siquiátrico, debido a la adicción que le aquejaba. Sin embargo, alega que en el lugar, no sólo su hijo, sino que todos los pacientes eran golpeados y humillados con frecuencia. “El jueves pasado, mi hijo fue agredido brutalmente por dos funcionarios del servicio”, dijo aún conmocionada por la situación.
Agregó que él tenía recaídas, en la que su conducta no era de las mejores, pero aún así -a su juicio- nada avala la utilización de la fuerza.
Producto de este hostigamiento y de los malestares propios de un tratamiento de rehabilitación, N.C.N. con una de sus sábanas tomó la drásticas medida de quitarse la vida, afortunadamente uno de sus compañeros advirtió la situación y logró rescatarlo, sin embargo, esto sucedió demasiado tarde, ya que actualmente el niño se encuentra en la UCI Pediátrica del recinto hospitalario, con un diagnóstico poco alentador.
La madre alega negligencia del centro médico, por el deficiente tratamiento que ha estado recibiendo, y no descarta iniciar acciones legales. “A mi hijo lo entregué sano y ahora se me está muriendo”, finalizó.