
Los ejecutivos salientes de la portuaria pretendían, por esta vía, que la justicia restableciera el imperio del derecho y se pronunciara por la autorización que otorgó la Armada para que dos buques estadounidenses (Nataniel Palmer y Laurence Gould), de grandes dimensiones, atracaran al muelle de la empresa particular Skorpios Patagonia Sur, en Puerto Natales, en circunstancias que el año 2006 a la EPA no le autorizó la operación de las naves “Nordnorge y Nordkape” en su muelle.
Concluyen los ministros que la solicitud de atraque y abarloamiento, efectuada por el representante de la sociedad Naviera y Transportes Patagonia Sur en el muelle Skorpios Patagonia Sur, “no sólo es excepcional por su propio contenido, sino que particular en relación a su destinatario y efectos, esto es el solicitante Naviera y Transportes Patagonia y el muelle Skorpios Patagonia Sur, terminal que no es operado por la recurrente”.
“Por lo mismo, el acto por el que se recurre no contiene pronunciamiento alguno que prive, perturbe o amenace el legítimo ejercicio de la actividad económica que la Empresa Portuaria Austral resuelva desarrollar”. Concluye el tribunal que “los hechos que se plantean en este recurso no pueden estimarse que sean de aquellos que, al tenor del artículo 20 de la Constitución Política de la República, puedan dar lugar a un recurso de protección”.