
Si de hablar de desarrollo de Magallanes se trata, uno de los personajes que seguramente tendrá mucho que decir es el presidente regional de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Alejandro Kusanovic, organismo integrado por seis entidades: la Cámara Franca, la Cámara de la Construcción, la Cámara de Comercio, Armasur, la Asociación de Ganaderos de Magallanes (Asogama) y la Cámara Marítima. A ellas se suman varias empresas que colaboran con su quehacer gremial. Kusanovic, en entrevista con Diario El Pingüino, se refirió a las principales carencias de la región, a las leyes de excepción y a los $ 4.200 millones de Zona Franca.
¿Cuál es su opinión respecto del último índice de actividad económica regional (Inacer) entregado para la región?
“Creo que es importante que vayamos creciendo. En esta oportunidad, tuvo una fuerte incidencia el comercio principalmente por la interacción que tenemos con Argentina puesto que el tipo de cambio que tenemos hoy día los está favoreciendo. Por otro lado está el tema de los Contratos Especiales de Operación (CEOP) lo que están aportando importantes recursos a la economía regional”.
Respecto de la leyes de excepción que están prontas a vencer ¿cuáles son las medidas a su juicio que debieran tomarse al respecto?
“Las Leyes de Excepción en Magallanes han tenido un rol súper importantes sobre todo el ex decreto ley 889 que es la bonificación a la mano de obra. Este es un tema que aún no está definido y que se ha alargado de forma artificial para este año, por lo tanto, nosotros se lo hemos planteado a las autoridades regionales. El segundo tema es la Ley Austral, que ha sido un verdadero fertilizante para el desarrollo regional ya que obliga a las empresa a invertir, de hecho, muchas de las inversiones que existen hoy día no se habrían realizado si no hubiera sido por esta ley. Yo pienso que esto ha sido un gran aporte sobre todo para el sector marítimo y hotelero. Yo siempre he dicho que el Estado tiene que ser un fertilizador del desarrollo; es decir, el Estado tiene que abonar y regar el jardín del tipo de planta que quiere que crezca, y eso es lo que hacen las leyes de excepción, y eso es algo que yo le planteé ayer (el lunes) al ministro de Obras Públicas, Hernán de Solminihac, cuando estuvimos abordo del Crux Australis, una de las inversiones que se han hecho gracias a esta ley. Una de las formas que hay para solucionar los problemas de conectividad precisamente es fomentando esta normativa, o mejorandola. La Ley Austral podría tener una mayor incidencia o mayor porcentaje, por ejemplo, cuando una embarcación es construida en un astillero chileno por que están generando más mano de obra. Nosotros por el momento sólo hemos sostenido conversaciones al respecto con el gobierno regional y no con los parlamentarios de la zona por que creemos que todavía existe un desorden energético que no hacen propicio que aúnen las fuerzas para saber hacia dónde van. Creo que todavía falta que se ordene un poquito las piezas. Creo que lo que falta es hacer un plan de desarrollo estratégico para Magallanes, acá necesitamos por ejemplo, un puerto, lo que tenemos hoy no lo es, necesitamos un lugar abrigado para dejar un buque sin tripulación y que no le pase nada y donde no quedemos tan afectos a las condiciones climáticas. La verdad es que si uno quiere vender la Región de Magallanes como región y no tiene un buen aeropuerto y no tienes un buen puerto es como invitar a tu vecino a tú casa y no tienes puerta y deba entrar por la ventana. Mientras esto no se desarrolle en la zona no vamos a poder progresar. Puede ser que tener un puerto no sea rentable como tal pero sí lo es para el desarrollo de la región. Creo que lo más grave es que no haya hoy en Magallanes una planificación estratégica que nos diga para dónde vamos y en qué invertir. Para lograr eso hay que aglutinar a los parlamentarios, a las autoridades, a los gremios”.
¿Qué opina usted de estos $ 4.200 millones que entraron a la región por Zona Franca y que todavía no han sido devueltos por el gobierno?
“A mí me parece un desastre. La nueva administración de Zona Franca recopila esta plata cobrando más a los usuarios (empresas instaladas) y eso a su vez se transfiere al usuario final, por lo tanto estos dineros son de todos los magallánicos que estamos acá. Me parece un desastre que no nos den los recursos si la plata al final era nuestra. Yo siempre fui enemigo de que la licitación de la Zona Franca se le conceda a quien paga más por administrarla porque a larga esto lo vamos a pagar todos los magallánicos, lo ideal hubiese sido que se le otorgue a quien paga menos por administrar el recinto”.
¿Que opina de las 1.200 concesiones pecuarias que permanecen a la espera para hacer aprobadas en Magallanes?
“Pienso que todas las cosas tienen que cohabitar. Yo creo que hay que compatibilizar el tema turístico con la salmonicultura, para que los dos cohabiten lo máximo posible porque el desarrollo no lo podemos frenar, lo que sí, hay que definirlo rápido porque mientras no se decidan no van a invertir?
¿Cómo evalúa usted lo hecho hasta el momento por el Gobierno Regional?
“Yo creo que el Gobierno Regional recién se está armando. Yo creo que durante estos seis primeros meses se ha tenido que compatibilizar varias cosas como la inexperiencia y los partidos políticos; recién se está armando la cosa, por lo que hay que dejar decantar todavía las aguas”.
¿Cómo ve a los partidos políticos?
“Yo creo que, en su gran mayoría, éstos desaparecieron o están desmembrados. Pienso que deben retomar la función que ellos deben tener en la sociedad, de transmitir el pensamientos de los votantes hacia la autoridad y mientras eso no pase yo pienso que no están funcionando, falta interacción. Creo que hoy en Magallanes falta reunir a los actores políticos, gremiales y sociales en una mesa y discutir cuál va a ser el desarrollo estratégico que queremos, dónde invertir la plata, porque los recursos hay que colocarlos donde se genere desarrollo”.