El Juzgado de Garantía condenó al interno José Enrique Barría Guerrero a cumplir una pena de “un mes de incomunicación con personas extrañas al  establecimiento penal”, y al pago de las costas de la causa, “como autor del delito de quebrantamiento de condena”.
El fiscal Felipe Aguirre presentó un requerimiento en contra de esta persona, basado en que el 1 de agosto de 2008 Barría Guerrero inició el cumplimiento de varias penas privativas de libertad impuestas por el Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas, y el Juzgado de Garantía, consistentes en cinco años por homicidio simple, más 61 días por hurto de especies, cinco días por hurto simple y cinco días por hurto falta, en el Centro Penitenciario de Punta Arenas. Pero con fecha 6 de abril de 2010, en circunstancias que de lunes a viernes, en horario de 19.00 horas a 23.00 horas cursaba la enseñanza media en medio libre en la Fundación para el Desarrollo de Magallanes, autorizado por el Consejo Técnico del Centro de Educación y Trabajo, el imputado no regresó al complejo penitenciario, con lo cual quebrantó dicha condena.
Cuando fue la audiencia para resolver este caso, el fiscal presentó el requerimiento y, en la misma audiencia, Barría Guerrero admitió su participación y responsabilidad en los hechos contenidos en la acusación del fiscal.