
El jueves se conmemoró el Día Internacional para la preservación de la capa de ozono, ahí se celebró además la firma en 1987 del Protocolo de Montreal con el objetivo de eliminar las sustancias destructoras del ozono en nuestra atmósfera e incluir otras en el listado. El protocolo ha conseguido detener la tendencia negativa de las últimas décadas del siglo XX y mantener estable desde entonces tanto la extensión del agujero de ozono como sus niveles. La extensión del agujero de la capa de ozono alcanzó su máximo el 2009, con 24,1 millones de kilómetros cuadrados (algo menor que la extensión de América del Norte).