
El 9 de marzo la PDI detuvo a la empleada al interior del supermercado, producto de un llamado del jefe de seguridad del establecimiento, dando cuenta que mientras revisaba las cámaras de seguridad del recinto se percató que Daniela Alderete, efectuaba una operación sospechosa al digitar varios números antes de la llegada de una clienta que compró varios artículos y pagó en dinero efectivo. En las imágenes observó que luego de entregar el cambio y la boleta de la clienta, la cajera sacó otro papel impreso de la caja registradora y lo guardó en la gaveta.
Hechos similares se habían detectado la semana anterior, donde varios clientes habían denunciado el hecho a Investigaciones.