Entre 2005 y 2009 se desempeñó como docente en la Universidad de Magallanes (UMAG) el coronel (r) Julio Castañer, quien es sometido a proceso como presunto autor del delito de homicidio calificado de Rodrigo Rojas Denegri y el homicidio calificado frustrado de Carmen Gloria Quintana en el denominado “Caso Quemados”.
Frente a ello, la casa de estudios regional emitió un comunicado público en el que explicó el vínculo que el ex militar tuvo con la institución, en la cual trabajó educando a jóvenes.
De acuerdo con la información proporcionada por UMAG, el ex militar “prestó servicios docentes por horas cronológicas mediante convenios a honorarios de la Universidad de Magallanes entre los años 2005 a 2009, en la carrera de Administración Pública, donde dictó las asignaturas de Ciencia Política, Introducción a las Ciencias Sociales, Estado y Sociedad y Sociología Política”.
El comunicado agrega “su llegada a la casa de estudios se dio en el contexto de la realización de seminarios de Derecho Internacional organizados por la Academia Nacional de Estudios Políticos y Estratégicos (ANEPE)”.
Sobre cómo se inició la relación laboral, la institución explicó que “se siguió el mismo protocolo que con todos los docentes, cual es solicitar su curriculum vitae – donde destacaban un Máster en Estudios Internacionales Estratégicos y una Licenciatura en Ciencias Militares – y sus antecedentes penales almacenados en el Servicio de Registro Civil, donde no era posible advertir su participación en violaciones a los derechos humanos”.
La casa de estudios manifestó que, ante los hechos dados a conocer por el conscripto Fernando Guzmán, quien sindicó a Castañer como autor del hecho, “algunos de sus ex alumnos se han manifestado sorprendidos con la información, toda vez que lo recuerdan como un hombre correcto, que manejaba los contenidos y cumplía sus responsabilidades”.
Agregó que “esta sensación de sorpresa se extiende a toda la institución, la cual lamenta que en Chile existan mecanismos de amedrentamiento o lealtades mal entendidas en las Fuerzas Armadas, que impidan que la información que algunos manejan respecto de los responsables de crímenes cometidos en dictadura salga a la luz, porque deja a instituciones de educación como la nuestra, sin posibilidad de marginarlos de la delicada e importante tarea de formar jóvenes”.
Ante todo ello, la UMAG manifestó que “tenemos la misión de formar buenos ciudadanos; profesionales inspirados en ideales colectivos, no sólo en las aulas, sino también en actividades culturales como los Diálogos sobre la Memoria que hacemos cada mes de septiembre, o las acciones con agrupaciones de derechos humanos. Al respecto, y a propósito de estos hechos que nos recordaron nuestra historia reciente, hemos establecido contacto con ellas, para explorar maneras conjuntas de trabajar por la memoria nacional”.