Más breve de lo esperado resultó ayer la visita del Presidente Sebastián Piñera a Magallanes.
A bordo del patrullero Piloto Pardo de la Armada y en medio del paisaje sublime del Canal Beagle, muy cerca de la isla Picton, el Mandatario rindió ayer un público homenaje “al coraje y profesionalismo” de los miembros de las Fuerzas Armadas chilenas que hace 40 años enfrentaron una difícil crisis internacional con Argentina. “Ustedes son un ejemplo que inspira e ilumina a las futuras generaciones. Nos sentimos orgullosos de lo que hicieron”, elogió el Mandatario, ante un público formado principalmente por militares, incluidos veteranos argentinos.
De este modo, el Gobierno conmemoró los 40 años del Acta de Montevideo, documento diplomático que abrió el camino de la mediación papal que cristalizaría en un acuerdo de paz firmado cinco años más tarde por ambas naciones.
A pesar del anuncio de una alerta temprana preventiva por una posible tormenta eléctrica en Cabo de Hornos, el avión Hércules de la Fuerza Aérea de Chile que trasladaba al Mandatario y su comitiva, arribó cerca del mediodía al aeródromo Guardamarina Zañartu de Puerto Williams. Lo acompañaban los ministros de Defensa, Alberto Espina y de Relaciones Exteriores, Roberto Ampuero. Allí fue recibido por la intendenta María Teresa Castañón, por el gobernador de la Provincia Antártica, Juan José Arcos, y por el alcalde de Cabo de Hornos, Patricio Fernández.
El acto de homenaje, finalmente, se realizó a las 16 horas bajo un tiempo espléndido que fue testigo del momento en que 30 militares chilenos recibieron una medalla de reconocimiento por sus servicios de manos del propio Mandatario.
Tormenta en Santiago
Lamentablemente, a esas alturas, otra tormenta había ya abortado la extensa agenda presidencial prevista en la región hasta el lunes. Parlamentarios de diversos partidos opositores entregaron una carta en La Moneda exigiendo la renuncia del ministro del Interior, Andrés Chadwick, tras las últimas revelaciones del Caso Catrillanca.
Tras comunicar la cancelación oficial de las actividades previstas en Tierra del Fuego, la comitiva abordó el vuelo de regreso a Santiago.
Fuentes bien informadas indicaron que, pese a esta cancelación, el Presidente Piñera regresaría el fin de semana para participar en las actividades programadas en Punta Arenas.