Una situación inédita se vivió ayer en el Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas, luego que a las 14.30 horas, cuando se inició el juicio oral en contra de tres acusados extranjeros de tráfico de drogas, uno de ellos, un ciudadano brasileño, pidió a los jueces que quería defenderse por sus propios medios.

Ante esto, los jueces José Octavio Flores Vásquez, Guillermo Alfredo Cadiz Vatcky y Palmira Muñoz Leiva, debatieron la petición y le indicaron al imputado brasileño que la legislación chilena y el sistema procesal penal contempla como imprescindible para los imputados ser defendidos por un profesional que tenga un título de abogados, ahora si quiere decir algo, el imputado puede solicitar la palabra, por lo tanto el extranjero no pudo renunciar a su defensor, el abogado Pablo Santander quien tuvo que alegar en su defensa buscando la absolución. 

En relación a esta situación, la defensora regional de Magallanes, Gustava Aguilar, señaló que “esta es una situación que no habíamos tenido, donde esta personas hace un tiempo atrás manifestó su intención de estar en desacuerdo con su defensa que tenía originalmente, pidió un cambio de defensor, se accedió a ello y en esa oportunidad se designó al abogado Pablo Santander para que lo siga representando, pero el manifestó ante el tribunal que no quiere a ningún abogado de la Defensoría Penal Pública, pero tampoco ha contratado algún defensor privado, a diferencia de los otros dos acusados. Ante esto, el tribunal resolvió que el tiene que tener una defensa técnica adecuada, y que en esas condiciones tal como lo manifestó al inicio de la audiencia el defensor penal público Santander, le indicó que estaba preparado y estudiado los antecedentes”.

La defensora regional agregó que “el estuvo con una huelga seca por varias semanas, y en esa oportunidad me entrevisté con el, y en desde ese momento que expresó su desconfianza con los defensores penales públicos, tal vez por se un organismo que no es autónomo, como también en relación a otras instituciones. En esa oportunidad también exigía que lo venga a visitar alguien del consulado de Brasil, pero quería que lo defienda alguien de su país, sin embargo quería que viniera alguien de la embajada en Santiago y les manifestó esta petición del ciudadano brasileño, y lo último que se supo es que alguien del consulado se iba a comunicar con el, ya que no quería nadie de Chile. La defensa se preparó de acuerdo a sus intereses, porque entregó antecedentes y se analizó su caso”.

Tras el incidente, el imputado brasileño Edmon Cauby Franca, prefirió guardar silencio y no prestar declaración ante los jueces.

Juicio

De acuerdo a la acusación de la Fiscalía, el día 19 de enero del año 2019, en circunstancias que los imputados de nacionalidad dominicana, Anselmo de los Santos rodríguez y Alexis Mendoza, actuando conjunta y coordinadamente, se encontraban, en el Aeropuerto Carlos Ibañez del Campo de la ciudad de Punta Arenas, momentos que fueron sorprendidos por la Policía de Investigaciones, portando, dentro de una mochila la cantidad de un kilo trescientos cuarenta y seis gramos de clorhidrato de cocaína, y la cantidad de un kilo setenta gramos de cannabis sativa, los cuales estaban destinados al tráfico de drogas y distribución entre los consumidores de Puerto Natales, señala la acusación. Además de lo anterior, se les incautó a los imputados dos teléfonos celulares y la suma de $74.000 en dinero en efectivo. Asimismo, en coordinación con los imputados ya referidos el imputado Edmon Cauby Franca, se dedicaba al tráfico de drogas en conjunto con ellos en la comuna de Puerto Natales, siendo sorprendido por la Policía de Investigaciones, en su domicilio ubicado en calle El Ovejero de la ciudad de Puerto Natales, mientras tenía en su poder una balanza digital, un bolso y la suma de $700.000 en dinero en efectivo.  

Con estos antecedentes, la Fiscalía pide una pena de 15 años de presidio para los tres acusados extranjeros, hoy continúa el juicio en el Tribunal Oral en lo Penal.

Declaración

Entre la declaración de los acusados, Alexis Mendoza, señaló que “me estaba tratando un cáncer de la próstata y estaba interno en el Hospital San José de Santiago, y me contactaron para hacer un trabajo, pero yo dije que estaba enfermo y con deudas en Santo Domingo y por eso lo hacía antes. Me pidieron que consiguiera una persona y conocí a Anselmo y me dijo que estaba necesitado y hacía el trabajo, pero que no había viajado nunca a Punta Arenas, por eso lo acompañé. Por mis declaraciones ante la Fiscalía dentro de la cárcel me han amenazado y mi vida corre peligro. Pero yo solo vine acompañando a Anselmo y yo no traía nada, antes si, por eso me arrepiento y pido perdón por hacerle daños a la sociedad, y pido una oportunidad. Somos hijos de los errores y si tengo que pagar lo haré, viví muchos años en Nueva York donde tengo nueve hijos”.