El proceso policial fue ajustado al derecho, por lo que se formalizaron cargos al imputado por los hechos “ocurridos el 21 de junio, a eso de las 4 horas, cuando el imputado conducía en estado de ebriedad por Bahía Decepción su automóvil marca JAC, gris, el cual al perder el control del móvil procede en primera instancia a colisionar el móvil Chevrolet Corsa perteneciente a la víctima, para luego impactar por proyección un taxi Hyundai 2017, perteneciente a la misma víctima, terminando impactado contra un Mazda Demio, provocando daños de consideración en los primeros dos móviles, mientras el tercer vehículo no sufrió daños. El estado de ebriedad fue ratificado con el examen respiratorio, marcando 1.83 gramos de alcohol por litro”.
Agrega el fiscal que los hechos constituyen el delito de conducción de vehículo motorizado en estado de ebriedad, en calidad de autor.
Tras la exposición de los hechos, el fiscal solicitó la cautelar de arraigo nacional, considerando que el imputado presentaba antecedentes, y con la finalidad de evitar que el imputado siga conduciendo, pidió la suspensión de la licencia de conducir, para el resguardo de la ciudadanía.
La defensa no se opuso a la suspensión de la licencia, pero sí al arraigo, solicitando que se pudiese cambiar por una firma ante la autoridad.
Ante ello, el tribunal determinó que el imputado quede con las cautelares de suspensión de la licencia de conducir y la firma mensual ante la Primera Comisaría de Carabineros, decretándose un plazo de 75 días para el cierre de la investigación.